Si el titulo Hambre a llamado tu atención como la nuestra, continua leyendo que el resto te podrá interesar aún más...
Hannah se suicida una noche sin pensar en el destino de sus perros: un viejo Bulldog, una Border hiperactiva y una Cocker mal encarada. No dejó comida. No avisó a nadie. Los días pasan, el hambre crece… y el hambre siempre saca lo peor de nosotros.
Dramaturgia: Jimena Eme Vázquez*. Dirección: Fernando Reyes Elenco: Juan Carlos Medellín, Fernanda Aragón y Alejandra Reyes.
Nuestra reseña...
EL HAMBRE SACA LO PEOR DE TODOS
La ciencia sociales son el pretexto ideal para teorizar sobre la vida en sociedad, así nos inventamos, por ejemplo, la otredad, que es el reconocimiento del otro como un ser diferente, pero debemos tener presente que existe mucho de animalidad en nuestra especie, y existen situaciones que pueden hacer que olvidemos siglos de civilidad y nos volvamos más animales que de costumbre, la sensación de hambre es el ejemplo perfecto del comportamiento animal en nuestra especie.
Ahora imaginemos la reacción de animales, específicamente perros, ante una situación por demás difícil: la muerte de su humana, el encierro, la falta de alimentos y por lo tanto la presencia del hambre. Este contexto es la antesala de un drama monumental, son perros, son animales y sin embargo hay tanto de nosotros en ellos y tanto más de ellos en nosotros.
Aunque uno de los temas centrales es el nivel de la inteligencia en algunas razas de animales, lo cierto es que, durante el montaje de Hambre, esta pasa a segundo plano y entonces lo que importa es la supervivencia, el amor perdido y la manera en que te enfrentas a un duelo.
No se si los actores en escena se dan cuenta de lo que provocan en sus espectadores y me encantaría saberlo, porque de este lado hubo de todo: sufrimiento, en verdad escuché algunos sollozos además de los míos, ansiedad, dolor y desesperación. Lo cierto es que cuando logras en el otro una amplia gama de emociones, algo estás haciendo bien, en este caso puedo enumerar los aciertos: la hechura del texto, Jimena Eme de verdad genera en su oficio literario una verdadera teoría de la otredad incluso trans especie, la elección actoral: Juan Carlos Medellín, Fernanda Aragón y Alejandra Reyes, demuestran que hace falta tan poco para brillar en el escenario y que es posible recrear lo imposible, no omito mencionar que ensamblar talentos, también es un talento, por lo que es necesario mencionar a Fernando Reyes en la dirección. Así, no me resta más que invitarlos a ver Hambre todos los miércoles hasta el 27 de junio a las 20:00 horas, en el teatro La Capilla, ubicado en Madrid no. 13. Es una cortísima temporada, así que corran o arrepiéntanse. Entrada general $200, adolescentes y adultos.