Nos emociona ver que el Foro Shakespeare sigue produciendo teatro, La cabra, ¿o quién es Sylvia? es su nueva propuesta, así que nos dimos a la tarea de estar en el teatro Rafael Solana para tenerte todos los detalles...
Narra la historia de Martin, un respetado arquitecto que acaba de ganar el prestigioso premio Pritzker, y a su querida esposa Stevie. Los dos se divierten con diálogos ingeniosos, réplicas brillantes y bromas cómplices. Parecen una pareja perfecta. Pero este matrimonio perfecto, esta vida casi perfecta, empieza a romperse en pedazos.
Dramaturgia: Edward Albee. Dirección: Bruno Bichir Elenco: Odiseo Bichir, Yolanda Ventura, Víctor Weinstock, Michel Abascal.
Nuestra reseña...
La cabra o, ¿quién es Sylvia?
Martín está sentado y pensativo, más bien desencajado, es posible observar que su cabeza está a kilómetros de distancia de la lujosa de silla de piel que lo sostiene, entonces aparece Stevie, su mujer, ella lo acaricia, bromea, lo prepara para dar una gran entrevista, en apariencia la pareja es feliz, más que feliz es perfecta, pero cualquier
Mi primera impresión fue que Martín padecía una enfermedad mental que claramente no había sido diagnosticada, y que Stevie esta tan enfrascada en su experiencia de la felicidad al lado de su marido que se ha vuelto incapaz de observarlo, de leerlo, de percibir que tiene al lado a un hombre atribulado.
El ritmo de la puesta en escena es congruente con el nivel de impacto que quiere causar en su espectador, habrían de pasar pocos minutos para escuchar la confesión de Martín en la piel del extraordinario Odiseo Bichir, de que está enamorado de Sylvia y que ella es una cabra.
Lo que sucede después sólo puede describirse con una palabra: conmoción, el paraíso que fueron se derrumba ante nuestros ojos, entonces el teatro se convierte en esa experiencia maravillosa capaz de sacarte de tu mundo de ensimismamiento vulgar y ordinario, de la nada eres voyerista de una familia perfecta, de la pareja ideal, te enteras de los detalles más escabrosos de su vida sexual y terminas pensando ¿en qué momento se cruzan los valores de la moral y el deseo?, ¿hasta qué punto vale la pena normalizar los mecanismos que ocasionan el placer?, ¿hasta qué punto es necesario hablar de ética en las prácticas sexuales?
Debemos señalar la agudeza del texto de Edward Albee, aunque en la práctica el éxito de las traducciones depende más bien de las adaptaciones, de la integración de la cultura de la sociedad que la va a presenciar y este ejercicio victoriosamente llevado, está en las manos del maestro Víctor Weinstock, quien también forma parte del elenco.
Así no me resta más que invitarle a que vaya al teatro, déjese conmover, conmocionar y llevar su racionamiento por caminos placenteros y poco transitados, salga diferente de como entró y disfrute de esta maravilla en escena en el teatro Teatro Rafael Solana ubicado en Miguel Ángel de Quevedo 687 Col. Cuadrante de San Francisco, a partir del 01 de marzo en los siguientes horarios: viernes 8:30 pm, sábado 8:00 pm, domingo 6:00 pm. Entrada general $400.
persona sensata sabría que la perfección igual que la felicidad, son señales de que estamos ante situaciones de las que hay que desconfiar.