Los miércoles son de. Y LA GUERRA SIGUE... en Teatro La Capilla, estuvimos en el estreno y ya les tenemos todos los detalles...
Un monólogo francamente de hueva, al más triste estilo Juan García Madero, que trata sobre eso de las pérdidas, las guerras internas, las cobijas destendidas, las losas del piso demasiado frías, los domingos, los grupos de autoayuda, y los viajes desesperados a la frontera norte – cosa que, como sabemos todos, no es más que una romantización geográfica- que uno hace para encontrarse a sí mismo. Una trágica historia sobre el hombre, los últimos osos polares vivos, los partidos del Atlas en Betamax, Mr. Tambourine Man y los jóvenes desnudos frente a los caimanes.
Dramaturgia: José Emilio Hernández Dirección: José Emilio Hernández Elenco: Emiliano Cassigoli y Ana Galán Souto (voz)
Nuestra reseña...
Y LA GUERRA SIGUE...
Vincent Company define Y la guerra sigue como “un monologo francamente de hueva”, y, estimado lector, yo sólo le puedo garantizar una cosa, durante el desarrollo de la obra usted podrá pasar por una amplia gama de emociones oscilantes entre la nostalgia y el humor, pero hueva, lo que se dice hueva lo dudo mucho.
El protagonista recibe una llamada: “su padre ha muerto”, esa noticia será el detonador que lo hará navegar hacia los límites de la cordura, separado sólo por una delgada línea cuya soledad lo vuelve más vulnerable.
¿Y que ocurre en la mente de una persona inestable ante la paradoja del amor?, o ¿de las drogas?, sin duda aquello se vuelve un parque de diversiones donde resulta aterrador lo divertida que puede resultar esta disparidad. Y la guerra sigue, se desenvuelve como un ejercicio íntimo, revelador y profundamente desgastante, juró por dios que a ratos lograba escuchar susurros ahogados resultado del llanto.
Así que no se deje llevar por las apariencias, Y la guerra sigue no es un tratado de salud mental, pero si un monologo lleno de locura, un ejercicio donde las fronteras -cómo elemento de romantización- están presentes, la melomanía, que es quizás su elemento más entrañables y espero que con el paso del tiempo se convierta en característica de la pluma de José Emilio Hernandez Marín, que también dirige dicha producción, llevando a un lucimiento pleno la intensidad interpretativa de Emiliano Cassigoli.
Razones que fundamentan que se trate de un texto ganador del 26º Festival Internacional de Teatro Universitario, organizado por la Universidad Nacional Autónoma de México. Yo le digo que además del mérito del reconocimiento técnico, se trata de un ejercicio que sin duda le dejará un gran sabor de boca, Vicent Company es un esfuerzo independiente por generar teatro de calidad, así que por favor no se pierda este ejercicio, vaya al teatro a darles una razón de ser para producir más y compártanos sus impresiones.
Y la guerra sigue... se presenta todos los miércoles a las 20:00 horas, hasta el 25 de septiembre en la sala Novo, del teatro La Capilla, ubicado en Madrid no. 13, alcaldía de Coyoacán. Entrada general $200. Clasificación: Adolescentes y adultos.